Alza en tarifas eléctricas afectará a 1,5 millones de ecuatorianos, según Páez

“El gobierno no tiene razones para exhibir ni justificar el incremento de las tarifas eléctricas, que afectará al menos a un millón y medio de personas”, así lo señaló el asambleísta por el movimiento CREO, Andrés Páez, durante una entrevista que concedió al programa Contacto Directo.

 

Esto en referencia a la resolución No. 041/14 del Consejo Nacional de Electricidad (Conelec), en la que se aprobó un nuevo pliego tarifario, que conlleva un incremento de 0,01 dólar el precio del kilovatio por hora (kWh) al sector residencial, y de 0,02 al sector comercial e industrial, a excepción a quienes se acojan a la tarifa de la dignidad, medida que se aplicará a partir de junio.

 

“Si se lee la resolución, lo único que se encuentra es una invocación a una serie de normas de orden constitucional y razones de orden teórico, pero no se precisa con exactitud por qué el gobierno decidió incrementar las tarifas eléctricas, y más aún cuando el país está enfrascado en otra discusión, que es la detención de un asambleísta refugiado en Sarayaku, respecto de lo cual se pretende, incluso, hacer una operación militar ya que se consiguió la reforma de la ley respectiva”, manifestó el legislador.

 

En cuanto a la zona industrial, señaló que serían más de 500 mil industriales los que asumirán el costo de este aumento, a diferencia de otros países donde gozan de un tratamiento preferencial, como un estímulo a la producción y la generación de empleo.

 

Pese a q ue el Conecel estima que esta medida se aplicará solo a quienes superan los 110 kWh en la Sierra, y los 130 kWh en la Costa, y que quien consuma hasta 300 kWh, el incremento no llegará ni a los cinco dólares, Páez expresó que quienes están en la tarifa de dignidad alcanzan a consumir el 20% de la energía eléctrica a nivel nacional, es decir que al 80% le afectará. “De un universo de 4,1 millones de personas que se acogen a la tarifa de la dignidad, 1,5 millones sí se verán afectadas y sufrirán de este incremento, que luce como un contrasentido porque le dicen a la gente: ahora van a dejar de consumir gas y van a pasar a consumir energía eléctrica, y cuando se va a producir eso, suben las tarifas, así se está afectando verdaderamente el bolsillo de los ecuatorianos”.